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Comida gourmet | Caldo gallego
Comida termoestabilizada, que permite ser almacenada sin necesidad de refrigeración por hasta 3 años.
Se cocinan en 6', y son la mejor opción para actividades outdoors, además, cuidan el medio ambiente.
Mas detalles en la descripción.
Características de las comidas termoestabilizadas:
Sabrosas: Mantienen el sabor original de comida casera, porque no contienen conservantes, estabilizantes ni agregados que para beneficiar la conservación, alteran su sabor. Tampoco están en contacto con el metal, como en el caso de las comidas enlatadas, lo que evita que adquieran el característico “sabor metálico” de esos productos.
Nutricionalmente equilibradas: Todas las recetas son elaboradas teniendo en cuenta los valores calóricos de cada porción. Estos valores figuran en el envase y es posible elegir la cantidad de calorías de cada ingesta.
Fáciles de conservar: Al no necesitar frío pueden estar guardadas hasta su vencimiento en cualquier estante sin tener la preocupación que antes o después de la compra se haya interrumpido la cadena de frío con los consiguientes peligros que esto representa para la salud. Su envase totalmente hermético asegura calidad y confiabilidad durante 3 años.
Fáciles de almacenar: Los pouches (“Envases blandos” de alta tecnología) son fácilmente adaptables en su forma a los espacios irregulares, permitiendo almacenar más cantidad que, por ejemplo latas, en el mismo volumen de espacio. El ahorro de espacio es de aproximadamente un 40 %.
Fáciles de preparar: No hace falta utilizar una batería de utensilios para llevar a la mesa un plato elaborado, simplemente un recipiente con agua caliente donde se coloca el pouch durante 6 minutos y listo para servir. No se ensucia vajilla, ni se desprenden vapores, humo, olores, grasa, sin derrames ni restos quemados.
Seguras: Al estar termoestabilizadas se asegura que cada ración está libre de gérmenes y bacterias que pueden afectar la salud. Tan importante condición de estos alimentos llevó a la NASA a preferirlos como dieta para sus misiones espaciales.
Económicas: Por su facilidad de uso permiten un ahorro considerable de tiempo, el ingrediente más caro en la actualidad para elaborar un plato. También desde el punto de vista de la propia elaboración resultan asombrosamente económicas puesto que no es necesario comprar productos que en general sobran para la preparación de las recetas. Ni mantener materias primas almacenadas.
Cuidado del medio ambiente: Prácticamente sin desperdicios, sólo se elimina un envase el cual es reciclable con mínimo impacto ambiental, sin filos cortantes, con un gran ahorro de energía en su preparación, en la deposición de residuos, en el transporte y en la conservación. De esta manera contribuimos a la conservación de los recursos no renovables de nuestro planeta.